Este cuento se trata de una estación de Ituzaingó del ferrocarril Sarmiento que todas las mañanas la estación se llenaba de gente, el tren iba repleto y en esos tiempos se podía viajar con la puerta abierta con un truco que todos sabían. Una mañana Don Ramón viajo en el tren junto a la puerta, en ese momento se trabo en la puerta y medio cuerpo estaba afuera su vida corría peligro y el solo cerró los ojos y pensó en su familia, en su hijo que él quería que fuera doctor y se casara con una mujer hermosa y que le diera muchos nietos en ese monto ente Morón y Haedo había una señal muy cerca de la vía del tren Don Ramón no se dio cuenta y se golpeo, el golpe fue tan fuerte que lo llevo debajo de las rieles del tren, según le contaron al hijo el murió muy rápidamente y sin dolor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario